El trabajo está orientado especialmente a jóvenes  y se realiza bajo el formato de talleres, con una modalidad vivencial para lograr el involucramiento y compromiso de los participantes. 

Se realizan actividades lúdicas que luego dan paso a debatir y reflexionar sobre nuestras conductas en el espacio público vial y la forma en que las mismas se vieron reflejadas en el juego.

También se realiza una actividad con gafas/lentes simuladores de graduación alcohólica. Los mismos simulan la graduación alcohólica permitida en nuestra ciudad para conducir (0.5 gramos de alcohol por litro de sangre para conductores de autos). Con los lentes colocados realizamos ejercicios de motricidad fina, como abrir una puerta o intentar agarrar una pelota en el aire. Esta actividad permite que los estudiantes evalúen si realmente estarían en condiciones de conducir habiendo ingerido alcohol.

Además, se obsequia a cada uno de los colegios donde se realizan los talleres un kit de paseo seguro. En lo que resta del año, seguiremos visitando las instituciones que se inscribieron en esta convocatoria que fue recibida con gran interés por la comunidad educativa.